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Mostrando entradas de mayo, 2014

5 errores graves de "El jefe infiltrado"

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El pasado jueves finalizó en La Sexta la primera temporada del programa El Jefe Infiltrado . En resumen, las cámaras de televisión graban las experiencias de altos directivos de sus respectivas empresas que se disfrazan para hacerse pasar por empleados que acaban de incorporarse en la compañía. A través de estas experiencias, se pretende evaluar a diferentes empleados evitando que éstos se comporten de manera diferente por saber que están siendo valorados por un superior. Además de los errores individuales que puedan cometer los diferentes jefes, viendo el programa me surgen varios aspectos negativos que transmiten todos los directivos de las empresas que aparecen: Parten de la mentira . No están siendo transparentes con sus equipos de trabajo. Es cierto que al final del programa se desvela la auténtica identidad, pero en realidad se está reconociendo que han mentido y que además lo han hecho de forma premeditada. Después de esta experiencia, ¿se puede generar un clima de confia

6 Consecuencias directas de no gestionar con ética (además de no poder dormir)

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Cuando trabajamos en el ámbito de la gestión de RRHH, debemos ser conscientes de que nuestra materia prima son las personas. Como cualquier otro departamento de una empresa, nuestro objetivo final es incrementar los ingresos y disminuir los gastos al mínimo. Nuestro principal problema en el momento de compararnos con los demás, es  la dificultad que tenemos para cuantificar aspectos que son intangibles   y la gravedad dePodemos saber el valor exacto que supone el coste de personal entre sueldos y cotizaciones a la Seguridad Social, pero será más complicado valorar el incremento de productividad obtenido por una acción formativa concreta. En ocasiones, la presión por obtener unos resultados económicos positivos en el corto plazo, lleva a las organizaciones a prestar poca atención a lo que autodenominan "su valor más importante" o cosas similares: los empleados. Los accionistas quieren resultados y pocas veces demuestran que la paciencia sea una virtud. Evidentemente, hay